En cuanto hayas elegido la foto que te guste, tu diseño se imprime en un póster de gran calidad y se corta a medida (con precisión de centímetros en el tamaño que quieras). A continuación, realizamos el laminado mate o brillante del póster, si es que lo has pedido también. Otra opción es el marco con paspartú adicional, que acentúa aún más el póster y le puede aportar detalles. A continuación, el póster terminado se convierte en una obra de arte integral con el marco idóneo a medida, ¡el póster enmarcado perfecto!
Durante la producción, los pósteres, enmarcados o no, se someten a varios controles de calidad, el último antes de embalarlos y enviarlos de forma segura en un paquete protector especial. Tras entregar el cuadro enmarcado a una de las empresas de paquetería con las que trabajamos, recibirás un enlace de seguimiento, con el que podrás consultar el estado del paquete en todo momento.
Cuando tengas el póster enmarcado en casa, ¡querrás enmarcar otro cuadro enseguida!